El sándwich de chorizo es uno de los bocadillos más saboreados en La Paz. El mercado Lanza tiene una casera que lo prepara de forma diferente.
“Hay sándwich de chorizo. Pase, pase, caserita. Bien yapado le voy a dar”, dice una de las ayudantes de doña Elvira, quien vende sándwich de chorizo en el tercer piso del mercado Lanza. Ella es considerada uno de los iconos de la gastronomía paceña, pues se dedica a este negocio desde hace 28 años.
Una delicia ChUQUISAQUEÑA en la paz. Elvira Goitia atiende desde las 07.00 hasta las 21.00. Al día, dice ella, espera a cerca de 300 comensales de todas las edades y clases sociales. Aunque su puesto tiene capacidad para siete personas, otras se dan modos para estar cómodos y saborear el sándwich. Según doña Elvira, cada día nacen nuevas competencias, no sólo en el mercado, sino en sus alrededores; sin embargo, su amabilidad es la tarjeta de presentación.
Preparado. El comensal, por el precio de siete bolivianos, degusta de un pan acompañado de lechuga, escabeche, tomate, mostaza, mayonesa y ketchup, y el infaltable chorizo, un embutido que lo prepara personalmente en su casa, por ello el éxito de su sándwich.
“Hay sándwich de chorizo. Pase, pase, caserita. Bien yapado le voy a dar”, dice una de las ayudantes de doña Elvira, quien vende sándwich de chorizo en el tercer piso del mercado Lanza. Ella es considerada uno de los iconos de la gastronomía paceña, pues se dedica a este negocio desde hace 28 años.
Una delicia ChUQUISAQUEÑA en la paz. Elvira Goitia atiende desde las 07.00 hasta las 21.00. Al día, dice ella, espera a cerca de 300 comensales de todas las edades y clases sociales. Aunque su puesto tiene capacidad para siete personas, otras se dan modos para estar cómodos y saborear el sándwich. Según doña Elvira, cada día nacen nuevas competencias, no sólo en el mercado, sino en sus alrededores; sin embargo, su amabilidad es la tarjeta de presentación.
Elvira Goitia sirve la especiadidad de la casa |
Preparado. El comensal, por el precio de siete bolivianos, degusta de un pan acompañado de lechuga, escabeche, tomate, mostaza, mayonesa y ketchup, y el infaltable chorizo, un embutido que lo prepara personalmente en su casa, por ello el éxito de su sándwich.
Doña Elvira, quien tiene dos hijos y tres nietos, recuerda que hace más de tres décadas ella vendía comida, luego enrollados de chancho, después sándwich de pollo y posteriormente el de chorizo. “Antes, era el puesto de mi abuela, y como me gusta cocinar, decidí poner un puesto con este platillo que para muchos parece simple, pero es uno de los más cotizados en La Paz”, afirma.
Como toda receta, tiene una “fórmula secreta: los chorizos que prepara doña Elvira no son elaborados con carne de cerdo, sino con otras. Ella explica que los embutidos que ofrece están mezclados con carne de res, llama y tocino, a diferencia de otros lugares donde los rellenan con “otras masas” para darle mayor consistencia.
Si bien Doña Elvira no es una de las pioneras en esta comida, comenta que quizá una chuquisaqueña inició este negocio. Sin embargo, ella destaca la habilidad de los paceños en la cuestión de los negocios.
7 bolivianos es el precio del sándwich de chorizo que ofrece doña Elvira.
300 personas es el número de comensales que doña Elvira atiende al día.
30 de agosto de 2012
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